MUJERES CON ESTILO

Puede que la vida profesional de una modelo sea tan efímera como su juventud y belleza, pero si su estilo perdura, podemos estar hablando de un icono de la moda que nos inspirará a través de los tiempos.
Kate Moss se corona entre las reinas de la pasarela gracias a su estilo irreverente y su facilidad para combinar prendas de diseñador con otras de mercadillo desde hace 20 años, y sigue siendo musa de las maisons, habiendo superado la barrera de los 40.

Si nos centramos en esta virtud, la de crear tendencia con cualquier cosa que te pongas, sin estar subida a una pasarela, sin ser especialmente bella, o una figura pública conocida hasta el momento, haremos referencia al fenómeno it girl, mujeres que brillan con luz propia en los eventos de moda, haremos referencia al poder del estilo.

Sabemos que Francia es el primer referente en moda desde su edad de oro, La Belle Époque, pero el chic parisino, ha vuelto a resurgir gracias a una generación de mujeres entrenadas por Carine Rotfield, directora de Vogue París hasta hace un año, cuyo poder para concentrar todas las miradas y sobre todo las cámaras, no tiene precedentes; Volveremos a comprobarlo en 2013 porque será la directora global de Harper´s  Bazar, la revista de moda más antigua del mundo.

Pero también nos gusta su sucesora, Enmanuelle Alt, con su estilo rockero, su amor por los estilettos y el color negro, los pantalones skinny y el cuero, gracias a Balmain y a Isabel Marant.
Su sentido de la elegancia y su estilo son fácilmente adaptables a las fashionistas, que queremos moda posible.

Siempre acompañada por su séquito, Capucine Safyrtlu, Geraldine Saglio, con su mismo paradigma, delgadas, con poco maquillaje, melena natural un poco desaliñada...
Frente a las italianas, diosas de la extravagancia, absolutamente contrarias a la sencillez, siempre rodeadas de flashes donde quiera que vayan; el trío Ana Dello Russo, Volpicela y Sansone, editoras y estilistas de Vogue Japón, mujeres estilosas, no especialmente jóvenes, no especialmente bellas, con un lenguaje estético colorista, recargado de complementos; looks prácticamente imposibles, pero absolutamente impactantes y poderosos. Volvemos al poder del estilo.