sábado, 11 de julio de 2020

DISEÑADORES DEL SIGLO XX - SONIA DELAUNAY



(Rusia 1889-1979)
Nacida Sonia Terk en Ucrania, se trasladó con sus tíos a S. Petersburgo, y animada por ellos comienza a estudiar arte en Alemania y París, por lo que pudo relacionarse con los artistas más importantes de la época.

En 1910 se casa con el pintor neoimpresionista  R. Delaunay. El artista adquiere en esta corriente  los conocimientos sobre luz-color y en 1911 se alinea al Cubismo, y participa en la famosa Sala 41 de los independientes.

La primera etapa de Sonia Terk está influenciada por los postimpresionistas, en especial Van Gogh y Gauguin, y por la pintura de moda a su llegada a París en 1905, el Fauvismo.


Al casarse, Sonia y Robert, darían lugar juntos, a la variante del Cubisimo, mucho más abstracto y colorista, que Apollinaire  denominó Orfismo, en 1912, aludiendo a Orfeo.

En 1913 creó telas con coloridos "simultáneos", y fueron notables en la Exposición de las Artes Decorativas de 1925.
Utilizó en sus diseños la importancia y el sentido del color en el arte popular ruso y se lo transmitió a su marido.

Al estallar la I Guerra Mundial la pareja se encontraba en España con el pintor muralista Diego Rivera y vivieron  hasta 1921 entre Madrid, Barcelona, Bilbao o Vigo, donde se pudieron relacionar con los artistas vanguardistas refugiados en España.
Cuando comienza la Revolución Rusa en 1917,  y perder así los Delaunay su principal fuente de ingresos, Sonia intensifica su labor como decoradora y diseñadora de modas, siendo su clientela la aristocracia española al abrir la "Casa Sonia".


Su estilo era completamente nuevo, basado el los contrastes del color, llamado por el matrimonio Simultané  (Simultaneísmo), que trascendió de la pintura a todos los objetos decorativos, muebles, lámparas, cortinas, encuadernación de libros, ropa...
El primer robe simultané, fue diseñado en 1913, Sonia se lo puso para un evento nocturno en el Ball Bullier, el legendario sitio de encuentro de los artistas de vanguardia y escritores. El crítico Apollinaire escribió en un artículo: "Los Delaunay, reformadores del vestido".
En aquel tiempo, la competencia entre los Delaynay y los futuristas italianos era intensa, y la nueva indumentaria "simultaneísta", marcaba las diferencias entre Milán y París.


Aunque es incuestionable la importancia fundamental de Giacomo Balla en la creación de moda futurista, la influencia de los diseños de Sonia Delaunay en el posterior desarrollo de esta, fue sugerido en un comentario crítico de la época por Apollinaire:
[...] No nos parece que sea el momento de lanzar nuevas modas, la inteligente bufonería en tiempos de paz y calma puede tener su propia razón de existir. Hoy el momento es demasiado serio para ser capaz de aceptarlo. Además aquí esta bufonería no tiene excusa de ser nueva. Es una copia de los trajes cubistas que la pintora francesa Delaunay y sus amigos llevan algunas noches en el Buller.


Sonia se consagra en el mundo de la creación textil aprovechando el momento de sofisticación y lujo que acompañan al Art-Decó.